Fue una experiencia de luces y sombras, porque hay que decir que la chavala es guapísima y tiene cuerpazo y encima duro. Pero le falla la actitud. Estuve media hora por 60euretes, la conversación fue tensa porque todo parecían malentendidos y no era algo cómodo. El servicio de francés estuvo bien, el folleteo un poco soso, solo se deja hacer pero poone muchas pegas, esto no, esto tampoco, los pechos no me toques.....no es muy cómodo. Para rematar es relojera claro, así que a ver si volvería porque está muy buena, pero claro, la actitud importa mucho.